Quiero mucho a Valparaiso, me gusta desde siempre. Aunque asumo que la ciudad que la continúa, jamás ha sido santo de mi devoción. No en verano al menos. Me gusta desconectarme, aunque sea solo por el día. Y en estas oportunidades, el puerto y sus cerros, varias veces han sido mi escape.
Caminando por calles del Cerro Concepción, esperando tocarme con un lugar mágico, llegué a Café Con Gràcia con mi amiga Amanda. Nos llamó la atención con solo pasar por fuera. Bajamos unos cuantos escalones y estábamos en un lugar que nos invitaba a sentarnos. Fue así como decidimos parar ahí.
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Para descansar aprovechamos de jugar a las cartas, con un mazo antiguo muy lindo que ahí tenían. Además leímos un par de poemas que eran muy buenos. Para comer, mi amiga pidió una tabla de quesos, que venía acompañado con pan con tomate y una mermelada de pimentón junto con un té, mi opción fue un prensado de jamón queso y un jugo de melón. Todo estaba muy rico, ambas quedamos contentas, pero sin duda lo mejor, era la atmósfera del lugar. Conservo un cuarzo que me compré ahí, que es parte importante del mueble de mi pieza. Es una excelente opción en el cerro, para sentirse desconectado de todo durante un rato. Sé que algunas veces tienen música, por si quieren pasar un momento entretenido. Les recomiendo además probar la tortilla de papa que ahí realizan y el jamón serrano.
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Ubicación: Calle Concepción 260-A, Valparaiso.
Esta foto la tomé de la página para que vean más o menos que opciones pueden disfrutar aquí:
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